La propuesta de trasladar un órgano del Estado enfrenta rechazo en la Asamblea Legislativa, donde legisladores oficialistas han manifestado su negativa a debatir el tema en el actual contexto político y económico. La diputada del MAS, Gladys Quispe, sostuvo que no es momento de discutir una medida de esta magnitud y que cualquier modificación debe ser analizada con responsabilidad.

Quispe enfatizó que La Paz ha sido históricamente la sede de gobierno y que la Constitución establece claramente su papel dentro del Estado. “No podemos aventurarnos a trasladar un órgano del Estado sin un cálculo político adecuado”, afirmó, advirtiendo que los representantes paceños no permitirán cambios que afecten la estructura gubernamental.

Oposición sin consenso en nuevas alianzas Por otro lado, la legisladora minimizó los intentos de la oposición por formar una alianza, asegurando que estas estrategias carecen de un liderazgo sólido y responden a intereses personales. Según indicó, los mismos actores políticos de los gobiernos neoliberales intentan regresar al poder sin ofrecer alternativas viables para la reactivación económica del país.

“No tienen un proyecto claro, solo buscan recuperar el poder. El pueblo boliviano no puede confiar en quienes en su momento dañaron la economía”, declaró Quispe, al tiempo que reafirmó que el MAS, bajo el liderazgo de Evo Morales, se enfoca en propuestas concretas para enfrentar la crisis económica actual.

En cuanto a la interna del oficialismo, la diputada negó divisiones dentro del partido y descartó cualquier tipo de celos políticos entre sus principales líderes. También aseguró que el senador Andrónico Rodríguez no se apartará del proyecto político del MAS y que el movimiento se mantiene unido de cara a las próximas elecciones.

El debate sobre la ley de traslado y las reconfiguraciones políticas continúan generando tensiones en el escenario nacional, mientras las distintas fuerzas buscan posicionarse con miras a los próximos comicios.