Carlos Lampe volvió a vestir los colores de la selección boliviana luego de ocho meses de ausencia por una lesión sufrida en septiembre de 2024. El arquero de Bolívar se integró a la concentración con renovadas energías, enfocado en aportar experiencia y liderazgo en la próxima doble fecha de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026.

“Me toca disfrutar este momento, competir y motivar a los chicos”, expresó Lampe al llegar al cuartel general del equipo nacional. Aseguró sentirse en plenitud física tras volver a competir a nivel de clubes. “Para mí ha sido un mes espectacular. Volví a jugar, me siento bien”, añadió.

El guardameta reconoció que, durante su recuperación, mantuvo contacto permanente con el cuerpo técnico y sus compañeros. “Extrañaba estar aquí. Siempre estuve presente, aunque no en la cancha. Hablaba mucho con todos y ahora regreso con la ilusión intacta”.

El arquero reflexionó sobre su vuelta, precisamente frente a los mismos rivales ante los que se lesionó —Venezuela y Chile—, encuentros donde Bolivia logró seis puntos. “Ahora estamos nuevamente convocados ante los mismos rivales. La ilusión y las ganas están”, afirmó.

Lampe también destacó su rol como guía para los más jóvenes. “Van a ver al mismo Carlos, que es competidor, que quiere lo mejor para el equipo. Si nos va bien a nosotros, le va bien al país”, dijo, al señalar la importancia del trabajo colectivo.

Sobre los próximos compromisos, mostró confianza en el potencial del grupo. “Podemos ganarle a muchas selecciones. Venezuela es fuerte, pero nosotros también tenemos lo nuestro y podemos sumar”, sentenció.