El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el secretario de Estado, Marco Rubio, incluyeron a Bolivia en la lista de naciones latinoamericanas que buscan fortalecer sus vínculos con Washington. Las declaraciones se dan a días del balotaje, donde ambos candidatos, Rodrigo Paz Pereira (PDC) y Jorge Tuto Quiroga (Libre), han mostrado una abierta intención de retomar las relaciones con el gigante norteamericano. Trump sostuvo que Bolivia es un país que "se está acercando al camino de las democracias" que buscan un comercio justo y equilibrado.

Rubio destacó que el proceso electoral boliviano representa “uno de los acontecimientos más prometedores” en la región, tras "25 o 30 años de un gobierno antiestadounidense y hostil". Señaló que ambos candidatos que se presentan a la segunda vuelta quieren "relaciones sólidas y mejores con Estados Unidos", viendo en esto una "oportunidad transformadora". Este optimismo marca un cambio de tono en la relación bilateral, deteriorada desde la expulsión del embajador estadounidense por el expresidente Evo Morales.

El balotaje presidencial se celebrará el domingo 19 de octubre, y ambos candidatos ya han realizado viajes recientes a Estados Unidos para reunirse con organismos y autoridades. Paz Pereira afirmó haber garantizado financiamiento externo para hacer frente a la escasez de combustible y dólares, mientras que Quiroga se reunió con representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Consejo de Seguridad.

El notorio interés de la administración Trump por Bolivia refleja la intención de Washington de ampliar su red de aliados en Sudamérica. Tanto Paz como Quiroga buscan revertir la situación, donde las relaciones se limitaron a encargados de negocios tras años de tensión, y el comercio con Estados Unidos fue perdiendo peso. Este cambio de política nacional es visto con buenos ojos en territorio estadounidense, que apoya el giro.