En una jornada inolvidable, las 25 reinas de belleza que llegaron a El Alto para la antesala del Miss Hispanoamericana y Miss Turismo Internacional, probaron algo del carnaval andino, bailaron con los ch’utas, las cholitas y los pepinos, pero además quedaron deslumbradas con la arquitectura neoandina de los cholets Crucero de Los Andes y Bumblebee en el Distrito 6.

Después del recorrido que hicieron por los teleféricos, las mises llegaron a bordo de los buses municipales hasta los cholets en la parte norte de la ciudad. Allí fueron recibidas por una tarqueada y una comparsa de ch’utas con cholitas y pepinos que invitaron a bailar a las divas.

Una vez en el interior del Crucero de Los Andes subieron hasta el octavo piso, donde se encuentra una réplica de la cabina de un capitán de crucero. Allí se tomaron fotos con el paisaje alteño y los nevados como guardianes. Ese sector tiene un parecido además con el Titanic.

“Esto no hay ni en Colombia ni en otros países”, sostuvo maravillada la Miss Colombia, Sharon Gamarra, mientras Miss Honduras (Daphne Gómez) tomaba la réplica de un timón de crucero para sacarse una foto.

Las reinas de belleza disfrutaron de la música autóctona y posaron con los ch’utas, pepinos y cholitas alteñas.

Posteriormente se trasladaron hasta el cholet Bumblebee donde la imagen gigante de ese personaje de Transformers se llevó la atención de las visitantes. Allí la temática y la música fueron electrónicas.

A un costado, Nikita Palma, Miss Perú, se robó las miradas con su destreza para bailar reguetón y en otro sector, Miss Guyana, Tamara Reusch, se tomaba unas fotos con una cholita en lo que fue la “Hora loca” de la fiesta en tributo a las reinas de belleza.

Así terminó el recorrido por los dos cholets más emblemáticos de El Alto y que el año pasado también recibieron a las candidatas a Miss Bolivia.