El delantero del Paris Saint-Germain (PSG), Ousmane Dembélé, no pudo contener las lágrimas al recibir el Balón de Oro 2025 y durante su emotivo discurso recordó a su amigo de toda la vida, Moustapha Diatta, quien ha sido un pilar fundamental en su carrera futbolística.

“Siempre han estado ahí para mí, que me han apoyado en los momentos difíciles, y también a mi agente, Moussa Sissoko, que siempre ha creído en mí… También está mi mejor amigo. Él y yo siempre estaremos juntos”, dijo Dembélé con la voz entrecortada en el Théatre du Chatelet de París, mientras Diatta, en las primeras filas, también se emocionaba visiblemente.

Una amistad que nació en Évreux

La relación entre Dembélé y Diatta comenzó en los bloques de viviendas sociales de Évreux, Normandía, donde crecieron juntos desde la infancia. Compartieron escuela, equipo de fútbol y tardes jugando en la calle. El fútbol se convirtió en su refugio y motor de superación en un entorno desafiante.

Incluso cuando Dembélé se trasladó a Rennes para incorporarse a la formación profesional, la comunicación entre ambos nunca se rompió. Diatta permaneció como su principal apoyo emocional, celebrando cada avance y alentándolo en los momentos difíciles.

Trayectoria y desafíos de Dembélé

Tras su paso por Rennes, Dembélé fichó por el Borussia Dortmund, donde nuevamente se reencontró con Diatta. Compartieron vivienda, entrenamientos y reuniones familiares semanales para evaluar su progreso. En 2017, llegó al Barcelona, donde ganó tres Ligas y se proclamó campeón del mundo en 2018, enfrentando al mismo tiempo críticas y lesiones que pusieron a prueba su resiliencia.

Durante este periodo, Diatta tomó la decisión de dejar su carrera futbolística para estar cerca de su amigo, describiendo su apoyo como “una reacción natural ante las adversidades de un amigo al que considero familia”.

Nueva etapa en París y consagración

En 2023, Dembélé decidió iniciar una etapa en el PSG, motivado por el reto de conquistar la Champions League y por la cercanía con su familia. Con 35 goles y 14 asistencias, culminó la temporada 2024-2025 ganando la Champions League y pocos días después recibió el Balón de Oro, el premio individual más importante de su carrera.

En su discurso, Dembélé enfatizó que el reconocimiento no es solo suyo, sino de todos aquellos que lo acompañaron en el camino, especialmente su amigo Diatta, cuyo apoyo incondicional fue clave para alcanzar la élite del fútbol mundial.

“No creo que se levante todas las mañanas diciéndose: ‘Soy campeón de Europa’. Con él, es más bien: la Champions, está hecha, marcas una casilla. Eres feliz pero pasas a otra cosa”, relató Diatta, reflejando la humildad de Dembélé pese a la magnitud de sus logros.