El sector del autotransporte manifestó su molestia por la falta de combustibles en diferentes regiones del país y anunció que no descarta movilizaciones en los próximos días. Los choferes se declararon en estado de emergencia tras el incumplimiento de los plazos acordados con las autoridades para regularizar el abastecimiento de gasolina y diésel.

Según los dirigentes, el compromiso asumido por las autoridades contemplaba una solución en el transcurso de una semana; sin embargo, a dos días del acuerdo, la situación no ha mejorado. “No hay absolutamente nada”, reclamaron los representantes, señalando que la escasez afecta tanto a La Paz como a otras regiones del país.

El transporte público y de carga se ve directamente perjudicado por la falta de carburantes, lo que podría derivar en medidas de presión anticipadas. “El autotransporte vive del combustible”, reiteraron los choferes, quienes consideran insostenible continuar trabajando sin acceso al diésel y la gasolina.

La dirigencia advirtió que, si en las próximas horas no hay una respuesta clara y efectiva, se adelantarán las medidas de presión previstas. “No nos queda otra que tomar determinaciones radicales”, señalaron, indicando que la paciencia del sector se agotó.

Finalmente, exigieron a las autoridades una solución inmediata y advirtieron que las movilizaciones podrían iniciarse sin esperar el cumplimiento total del plazo acordado. La situación genera preocupación ante un posible paro del transporte en todo el país.