En las últimas horas, diversas autoridades han solicitado una investigación exhaustiva sobre las denuncias de estupro que involucran al expresidente Evo Morales.

Las acusaciones han generado indignación, sobre todo por tratarse de un delito que afecta a menores de edad.

Parlamentarios, como el diputado Huanca, exigen que la Cámara de Diputados trate urgentemente el proyecto de imprescriptibilidad para delitos sexuales contra niños, un tema que lleva meses postergado.

Esta situación ha puesto en el ojo público no solo las acciones de Morales, sino también el papel de las instituciones judiciales.

La diputada Gloria Callizaya ha manifestado su frustración ante la situación, destacando la gravedad de las declaraciones recientes del expresidente, quien admitió haber tenido una relación con la joven implicada, aunque ahora es mayor de edad.

Callizaya criticó que Morales intentara desviar la atención del caso alegando que estaba atendiendo a su familia.

La diputada considera que la sociedad no debe tolerar este tipo de abusos, independientemente de la posición que ocupe el acusado.

El debate sobre la necesidad de fortalecer las leyes contra delitos sexuales se intensifica. Callizaya llamó a la reflexión, especialmente en un momento en que se acercan nuevas elecciones.

A su juicio, las organizaciones sociales y la justicia deben tomar medidas contundentes para que no se repitan casos similares.

Las acusaciones contra Morales han revivido viejos resentimientos hacia su gestión, señalada por supuestos manejos autoritarios y el control del sistema judicial.

Además, se discute la necesidad de trasladar el caso a la sede de gobierno para una investigación más transparente.

El proceso ha estado lleno de dificultades, con cambios de jurisdicción que, según algunos, buscan proteger al expresidente.

Callizaya y otros parlamentarios insisten en que se aplique la ley sin importar el rango del acusado, y que este tipo de crímenes no queden impunes.